Las entregas de pedidos por drones se encuentran en una etapa de pruebas en diversas partes del mundo, a la espera de normas adecuadas que regulen su funcionamiento en el espacio aéreo en Estados Unidos y Europa. Al momento, esta modalidad estuvo limitada a vuelos de prueba para entregas de pizzas en Rusia en 2014 , mientras que Amazon logró realizar una demostración a fines de 2016 con el envío a domicilio de una bolsa de palomitas en una localidad inglesa. Las limitaciones aún son considerables, ya que por ejemplo permanece la obligación de quedarse lejos de las masas y lo de volar solo durante las horas diurnas y dentro del campo visual del piloto.

Mientras tanto en China, donde ahora mismo se encuentra el mercado mundial del comercio por internet (52% de los habitantes hace una compra con el móvil al menos una vez a la semana), algunas empresas ya utilizan drones para las entregas o otros dispositivos innovativos como robots repartidores en Pekín.

El primero a utilizar los drones fue Alibaba, el gigante chino del comercio electrónico, con ocasión de la necesidad de entregar en las islas. Según la agencia de noticias Xinhua, que es la oficial de la República Popular China, en total se usaron tres drones que trasladaban un total de seis cajas de maracuyás con un peso combinado de alrededor de 12 kilogramos y que volaron desde Putian, en la provincia de Fujian, hasta la isla de Meizhou.

Tambien JD.com, otro big del sector e-commerce, retó diferentes compañías de todo el mundo en diseñar y desarrollar prototipos de drones con resistencia y rango suficiente para entregar mercaderías a gran escala, con un peso hasta 1 tonelada, y ser de ayuda para los mensajeros, en particular en esas áreas donde el transporte es demasiado lento o costoso. Y precisamente por su conformación geográfica, China ya se encuentra en una fase avanzada de la aplicación de vehículos aéreos dentro de sus departamentos logísticos. Hay varias zonas dentro de su territorio donde incluso es imposible llegar con camiones, y la cantidad de pueblos rurales es muy elevada. Asì que el objetivo de China es ofrecerlos la misma experiencia de compra, al mismo precio, a través de los drones. JD.com, por esto, espera gastar menos de lo que actualmente se hace con mensajeros humanos, cuando ya la tecnología será lista para la gran escala.

El delivery chino Ele.me (una plataforma de entrega de comida que forma parte de Alibaba) incluso promete entregas en 20 minutos en unas 17 rutas aéreas de una zona industrial de Shangai, a través del utilizo de drones especiales de alta tecnología. Esta modalidad no es un servicio con una entrega puerta a puerta realizado por un dron, ya que está basado en dos puntos de retiro para cada una de las rutas cubierta por los vehículos aéreos. A su vez, el radio de entrega de Ele.me alcanza unos 58 kilómetros cuadrados en el parque industrial Shanghai Jinshan.